La presente publicación forma parte de una línea de trabajo sobre los paisajes andaluces en la que la Junta de Andalucía viene insistiendo desde que en 1992 aprobó, junto con las regiones de Languedoc-Rosellón y Toscana, la Carta del Paisaje Mediterráneo (Carta de Sevilla) que fue adoptada por el Consejo de Europa y constituyó la base de partida para redactar el Convenio Europeo del Paisaje (Florencia 2000) recientemente ratificado y vigente en España desde marzo de 2008.
Desde entonces las actuaciones relativas al paisaje han abundado en distintos departamentos, especialmente en la Consejería de Obras Públicas y Transportes, que en la Ley 8/2001 de Carreteras de Andalucía reconoció la importancia de tener en cuenta su valor. Un doble enfoque prevalece en este sentido:
- entender que la consideración del paisaje permite cualificar las actuaciones de las administraciones públicas y, al mismo tiempo,
- ver en las carreteras una oportunidad clave en nuestro tiempo para mostrar la riqueza y variedad de los paisajes andaluces.
Con dicho enfoque, la Consejería de Obras Públicas y Transportes viene solicitando diferentes trabajos al Centro de Estudios Paisaje y Territorio, creado por convenio con las Universidades Públicas de Andalucía. Entre ellos éste que ahora se presenta.